Descripción de los tejidos más comunes

Para la elección de la tela y su composición es bueno tener en cuenta:

• El uso que se le quiera dar. Los tejidos naturales como la piel, el algodón, la seda, la lana y el lino suelen ser la opción más natural y de mejor confort (táctil y visual), aunque nuestra recomendación es adquirir una tapicería con al menos el 30% de material sintético. Será más duradera, más fácil de lavar y más resistente al roce. Por ejemplo, un sofá familiar de uso diario requiere una tela más resistente y lavable que la de un sillón “de lectura” de uso semanal, que podrá tapizarse con tejidos más naturales.
• Su textura al tacto y su combinación dentro de la decoración general, los colores y los muebles.
• Junto a cada tela, en la pestaña opciones / colores, podrás saber sobre cómo limpiar y mantener cada tipo de tela. Cómo lavarla y cómo proteger la durabilidad de los colores.

Como curiosidad les presentamos las características de algunos de los tejidos más habituales usados en la fabricación de tapicerías:

Brocado
Antes era el nombre que recibían los tejidos fabricados con hilos de metales preciosos (oro o plata), actualmente sustituidos por fibras sintéticas. Su propiedad fundamental es su resistencia. De su confección se obtienen atractivos dibujos en relieve de diferentes colores. Se usa también para la fabricación de cortinas.

Chenille (o Chenilla)
Forma una trama de hilos pequeños cortados que le otorgan aspecto aterciopelado. Puede ser de algodón, lana o lino, aunque lo habitual es la mezcla de fibras sintéticas y naturales para garantizar resistencia y pocas arrugas. También se usa para la fabricación de cubrecamas.

Damasco
Tejido parecido al brocado, pero más fino y menos pesado por no tener relieve. De algodón o seda, con efecto brillante o mate obtenido mediante su ligamento. Se mezclan como máximo dos colores. Además de para tapicerías, se fabrican con este tejido cortinas y almohadones.

Jaquard
Esta tela lleva el nombre de la máquina con la que se fabrica, un tipo de telar inventado por el tejedor francés Joseph Marie Jacquard. Es característico de este tejido la posibilidad de utilizar gran variedad de colores, dibujos y motivos. Además de ser muy grueso.

Lona
Es una tela fuerte y de hilado denso, normalmente de algodón o lino. Su propiedad fundamental es ser muy resistente.

Loneta
Es un tejido fuerte y rígido, hecho con hilos desiguales de algodón. Parecido a la lona pero más ligero. Presenta colores sólidos y brillantes. Es también muy resistente. Como la lona, con la loneta, además de tapicerías se fabrican fundas de sofás.

Microfibra
La microfibra tiene cada vez más importancia en la industria textil. Generalmente están compuestas de 80% de poliéster y de 20% de poliamida. Los tejidos de microfibra son muy suaves e indeformables y poseen características destacables como una gran capacidad de absorción (aproximadamente el doble que el algodón), facilidad de limpieza y una gran resistencia a los lavados frecuentes, pudiéndose lavar a temperaturas muy altas.

Pana
Es un algodón gordo de hilado fino con pequeñas nervaduras aterciopeladas que varían en grosor. Se usa para la fabricación de tapicerías, cortinas y ropa.

Piqué
Otro tejido de algodón que se distingue por sus dibujos en relieve, recuerda a un nido de abeja. Usado también para la fabricación de cubrecamas, colchas y manteles.

Terciopelo (velvet)
También de algodón, aunque originariamente de seda (los terciopelos finos son de algodón 100%). Es habitualmente grueso, dependerá del corte del pelo sus diferentes tipos. Es una tela delicada, resistente al agua y las arrugas. Se limpia en seco y debe plancharse sobre tabla. Absorbe la luz del ambiente y es usado también para cortinas y cubrecamas.